POR JUAN MARRERO PORTUGUÉS
Fuente: Diario de Las Palmas (27-08-1968)
(…) “En primer lugar, el Director de la Caja Insular de Ahorros de Gran Canaria y Procurador en Cortes, don Juan Marrero Portugués, pronunció el pregón de las fiestas loando la labor del hombre lanzaroteño, en sus tres facetas de campesino, marinero y hombre de empresa, siendo muy aplaudidas sus expresivas palabras.
Seguidamente, y mientras el Jurado deliberaba, el Grupo coral Adeste Cantores de La Laguna interpretó diversas composiciones, actuando en el intermedio el guitarrista lanzaroteño Domingo Corujo”.
Fuente: Antena (13-08-1968)
El pregón de las fiestas de San Ginés, que se pronunciara en el parque municipal durante la gala de elección de “Miss Lanzarote estará este año a cargo del director general de la Caja Insular de Ahorros de Gran Canaria y procurador en Cortes por la representación familiar don Juan Marrero Portugués, brillante orador, quien ha aceptado pese a sus múltiples ocupaciones el ofrecimiento que a tal efecto la ha formulado el Ayuntamiento arrecifeño. En 1967 fue pregonero el también procurador en Cortes y presidente del Gabinete Literario de Las Palmas don Manuel Padrón Quevedo y en 1966 el escritor y periodista don Domingo Manfredi Cano.
Fuente: Antena (20 de agosto de 1968)
( …) “Sin que ello desmerezca a los pregoneros que han intervenido en anteriores ediciones, todos valiosos y magníficos, hemos de decir que la gente salió con la satisfacción y el regusto a flor de labios, ante la maravillosa lección de fino corte oratorio y enjundioso contenido que nos ofreció ese excepcional y extraordinario hombre público que es Juan Marrero Portugués. Nos asombró a todos, en su reencuentro con su tierra adoptiva lanzaroteño, ese impetuoso crecer de su talante, de su dicción, de su temple y de sus certera visión en el enfoque de nuestros problemas y nuestras cosas, ganándose así a pulso y nervio, en el fluir de sus primeras palabras, el corazón y la voluntad del masivo auditorio. Marrero Portugués volcó, abiertamente, sin ninguna clase de reservas, todo el hondo y profundo sentimiento del sincero amor que profesa a su amada tierra lanzaroteño. Inolvidable lección de madurez y criterio de Juan Marrero Portugués, difícil de olvidad, especialmente para los que como sus más viejos amigos arrecifeños supimos ver en él una promesa en ciernes, cuajada hoy en el más esplendida y esperanzadora de las realidades. Fue una pieza oratoria, repetimos, plena de color, belleza y contenido”.
Fuente: El Eco de Canarias (Agosto 1968)
(…) “Inició el acto el Procurador en Cortes don Juan Marrero Portugués quien como mantenedor, pronunció un brillante pregón haciendo un canto a la labor esforzada de los hombres y mujeres lanzaroteñas, campesinos y hombres del mar. Hizo hincapié en la necesidad de una unión y esfuerzo común para que Lanzarote siga siempre adelante en la senda de prosperidad y desarrollo abierta por este pueblo laborioso. Puso su confianza en la juventud, a lo que hizo un llamamiento, a esa juventud lanzaroteña que se está forjando en centros de estudio y en cuyas manos está el futuro de la isla. Añadió, que para nuestra civilización, la revolución industrial significó la mecanización del músculo y ahora estamos asistiendo a la era electrónica, en la que se ha llegado a la mecanización de la mente con lo cual se pueden obtener insospechables resultados. Unas bellas páginas llenas de poesía sobre la mujer lanzaroteña cuyas máximas representantes esta¬ban reunidas en esta noche inolvidable, cerraron la magistral intervención de nuestro Procurador en Cortes, que recibió una cerrada ovación de la gran masa de público asistente”.